Está hecho de combustibles fósiles y productos químicos sintéticos. Esos productos químicos pueden filtrarse si entran en contacto con alimentos calientes, grasientos o ácidos. Sí, mantienen el café caliente, pero también pueden agregar una dosis no deseada de toxinas a su bebida.
Los animales a veces lo comen. Las tortugas y los peces parecen confundir el EPS con la comida, y eso puede matarlos. No solo no pueden digerirlo, sino que la espuma puede estar llena de venenos que ha absorbido de los contaminantes que flotan en el agua.
No es fácil de reciclar. Algunas casas de correo comerciales pueden aceptar cacahuetes envasados, pero la mayoría de los centros comunitarios de reciclaje no aceptan contenedores desechables de espuma.
La mayoría de los productos EPS actualmente no se reciclan debido a la falta de incentivos para invertir en los compactadores y los sistemas logísticos necesarios. Debido a la baja densidad de la espuma EPS, no es económico recolectar. Pero, si el desecho pasa por un proceso de compactación inicial, se vuelve más denso. En Inglaterra, este proceso se utiliza y el EPS se recicla en perchas, bancos de parques, macetas, juguetes, reglas, cuerpos de engrapadoras, recipientes de plántulas, marcos de cuadros y molduras arquitectónicas.
Algunas comunidades han prohibido todos los productos que contienen EPS, incluidas las "palomitas" de embalaje y todos los recipientes, además de las cajas de comida "para llevar".
La prohibición, apenas se puede contar como una solución, sin embargo, cómo terminar el reciclaje de espuma sin sacrificar los beneficios de la gente es una pregunta importante en la que todos debemos pensar.
El reciclaje de Greenmax se ha dedicado al poliestireno reciclado desde 2007. Los densificadores de espuma de poliestireno Greenmax son muy famosos por su alta calidad en la compactación de espuma de poliestireno en EE. UU.
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